Nueve claves para evitar la censura en Facebook

Vivimos tiempos de zozobra, caos y disparate —y hackers rusos, muchos hackers rusos—, cuando la democratización de la exposición desprecia, cada día más agresivamente, las más elementales reglas de la cortesía y la ética, de la educación y el sentido común. En este contexto escandaloso, y ante las protestas tanto institucionales como empresariales,  gubernamentales, etc., que claman por una limpieza a fondo de contenidos basura, sitios digitales como Youtube, Twitter y Facebook han cedido a las presiones y decidido endurecer sus sistemas de control y persuasión.

Frente a esta realidad incontestable, algunos consejos de quien nunca ha sido censurado por Facebook incluso habiendo criticado duramente a políticos y gobiernos de todos los bandos e ideologías (es decir, algunos consejos de Armandito, éste que está aquí):

  1. No comparta enlaces sensacionalistas, o Fake News, de websites dudosas solo porque concuerdan con su pensamiento o intereses políticos. Recuerde que EE.UU. está bajo ataque ruso y en general de regímenes autoritarios como el cubano cuyos hackers se hacen pasar por ciudadanos y sitios estadounidenses para influir en las elecciones y crear falsos estados de opinión
  2. Relacionado con lo anterior: Desconfíe de aquellos titulares «convenientes» o teorías de la conspiración que provienen de páginas que nunca había oído mencionar en su vida. No los reproduzca. Entienda que prácticamente estamos en guerra
  3. Relacionado con lo anterior pero en sentido general: No comparta rumores que no ha confirmado antes exhaustivamente, mucho menos si se trata de la supuesta aparición de medicamentos «milagrosos» que en realidad pueden afectar la salud ajena o tener efectos secundarios nocivos (usted no es un especialista)
  4. Evite el bullying, la difamación —el asesinato de la reputación— y los ataques personales. También invadir el espacio ajeno es un acto autoritario y en muchos casos punible. Facebook no es el Solar del Reverbero aunque lo parezca en ocasiones
  5. Evite los llamados a la violencia del tipo que sean, las amenazas y el alarde belicoso
  6. Evite utilizar palabras y hacer proposiciones soeces. Si no lo hace en público o en casa ajena, si suele discurrir civilizadamente en la calle, ¿por qué en Facebook se comporta como una rata?
  7. Evite toda clase de fotos o ilustraciones que puedan ser tomadas por pornografía o relacionados. Recuerde que no todo el mundo es un especialista
  8. Compórtese como si hubiese sido invitado a la casa de un familiar o de un amigo o de alguien que estima, donde ni gritará ofensivamente ni tirará los platos ni acusará a quien discrepe de «hijo’eputa» o «comunista»
  9.  Por último, comprenda de una buena vez que Facebook no es un sitio estatal sino una empresa privada que ofrece un servicio gratis, con absoluta libertad de implementar las normas o reglas que estime convenientes y hacerlas cumplir. No joda el negocio para que el negocio no lo joda. Si usted visita un restaurante y comienza a blandir un machete en medio del salón, o a mearse sobre las mesas, o a soltar palabrotas, va a ser desalojado, ¿cierto? Pues eso. Facebook es el restaurante

 

Artículo anteriorOlga Tokarczuk
Artículo siguienteVariantes de una traducción
Escritor, editor, zensicólogo. Ghost Writer. Entre los años 1998 y 2000 se desempeñó como periodista independiente en Cuba. Tras recibir el premio de ensayo anual de la fundación alemana Friedrich Naumann, con la revista Perfiles Liberales, en febrero del año 2000 viajó a Europa, donde residió en España e Inglaterra hasta radicarse en Estados Unidos en 2004. Tiene una docena de libros publicados. Dirige Neo Club Ediciones y es uno de los coordinadores del proyecto Puente a la Vista y del Festival Vista.