Gastón Baquero y Rafael Díaz-Balart. Sobre racismo y clasismo en Cuba

Rafael Díaz Balart en un mitin en Gibara, oriente de Cuba, en octubre de 1958

Esta selección de ensayos y artículos, centrados en el problema clave del racismo y el clasismo, gira alrededor de dos personalidades fundamentales en la historia de Cuba: Rafael Díaz-Balart y Gastón Baquero. El hecho de que se conmemorara el centenario del nacimiento de este último en el año 2014 sirvió como motivación adicional para dar a la imprenta la primera edición de este libro, que además de citas de los autores homenajeados contenía (contiene) reflexiones de Lincoln Díaz-Balart, César Jesús Menéndez, Juan F. Benemelis, Armando de Armas, Orlando Fondevila y este servidor. Esta segunda edición, con los ajustes que son del caso, sigue el hilo de la primera.

De cualquier manera, la intención no por obvia parece menos necesaria: Denunciar y situar en el centro del debate sociopolítico la cuestión medular del racismo y el clasismo, elementos que se cuentan entre los principales causantes del desastre sufrido por Cuba a partir de 1959, y que llega hasta nuestros días.

Desde este presupuesto, el libro está dividido en dos partes complementarias. En la primera, toma la palabra Rafael Díaz- Balart con fragmentos extraídos de su autobiografía Cuba: Intrahistoria. Una lucha sin tregua. En la segunda parte se rinde homenaje a Díaz-Balart y Gastón Baquero, a los que unió la amistad tanto en Cuba como en el exilio, a través de los textos de los autores arriba mencionados. En este sentido, cabe especificar que el ensayo de César Jesús Menéndez, fundamentalmente enfocado en la figura del célebre líder sindicalista azucarero Jesús Menéndez (su abuelo), ejemplifica a la perfección al político honesto, proactivo, al que en su momento aludiera Baquero en el prólogo Rafael Díaz-Balart o la vocación política.

Es preciso acotar que en un ámbito en el que el racismo y el clasismo permean a menudo las relaciones profesionales y sociales, como ha sido el caso cubano antes y después de 1959, Rafael Díaz-Balart destacó siempre por su comportamiento aguerridamente antirracista. Como me contara personalmente el ya fallecido poeta y editor Orlando Fondevila, el antirracismo no era en Rafael una pose, una manera de parecer políticamente correcto, sino un profundo sentimiento, una actitud vital. Delante de él no era posible hacer esos chistes discriminatorios al uso, tan comunes entre cubanos que incluso hasta algunos afrocubanos los repiten ocasionalmente. No solo no se reía con ellos, sino que los cortaba de cuajo.

 

Gastón Baquero y Rafael Díaz-Balart. Sobre racismo y clasismo en Cuba constituye un libro imprescindible para las nuevas generaciones de cubanos que han crecido en una Isla donde impera la censura más feroz y abarcadora, o incluso lejos de ella. Esta selección apunta al corazón del problema cubano, latente bajo el camuflaje con que la retórica y la desinformación totalitarias, más los prejuicios heredados del sistema de castas de la metrópoli española, han pretendido ocultarlo o relativizarlo. Es preciso reconocer las causas del problema, debatirlas en alta voz, para darle solución al problema, y eso lo tenían muy claro los dos grandes hombres que homenajea este libro.