Putin y la manipulación cavernaria

El discurso de Vladimir Putin acusando a Occidente de rechazar la «diversidad cultural» no puede ser más hipócrita y manipulador. A bote pronto, uno pensaría que se trata de un sketch humorístico si no conociera el cinismo sangriento del personaje.

No es la diversidad lo que rechaza Occidente -o al menos el Occidente predominante, abierto, que Putin combate-, sino todo lo contrario: Rechaza la dictadura. Rechaza la exclusión. Rechaza la censura. Rechaza que en pleno siglo XXI gobernantes como Putin envenenen a sus opositores para evitar la alternancia democrática. Por mucho que no practiquemos el maltrato a la mujer o la discriminación política, pongamos por ejemplo, no quiere decir que los respetemos en nombre de una supuesta «diversidad». Son regímenes como el ruso, el bielorruso, el cubano, el chino, el venezolano, el iraní, entre otros, los que se niegan tiránicamente a aceptar la diversidad.

Putin quiere establecer, recurriendo a eufemismos, modismos arbitrarios y teorías conspirativas, que respetar la represión y el asesinato es sinónimo de respetar a otras «civilizaciones», cuando precisamente es él quien intenta imponerle al mundo civilizado el mundo de las cavernas, como se ha visto tantas veces en la propia Rusia y fuera de ella (últimamente en Ucrania).

Justificar el crimen político, aplastar la disidencia y perpetuarse en el poder con el pretexto pueril de la «diversidad cultural» -como mismo hace La Habana-, es lo que pretende este agente de la KGB, y ya de paso pretende que somos idiotas.


 

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Escritor, editor, zensicólogo. Ghost Writer. Entre los años 1998 y 2000 se desempeñó como periodista independiente en Cuba. Tras recibir el premio de ensayo anual de la fundación alemana Friedrich Naumann, con la revista Perfiles Liberales, en febrero del año 2000 viajó a Europa, donde residió en España e Inglaterra hasta radicarse en Estados Unidos en 2004. Tiene una docena de libros publicados. Dirige Neo Club Ediciones y es uno de los coordinadores del proyecto Puente a la Vista y del Festival Vista.