El corazón de los cubanos no lo pueden apagar

Es totalmente mentira que en las barriadas habaneras existe apoyo, multitudinario o masivo, al régimen del dictador Miguel Díaz-Canel. Todo lo contrario. En cada barriada de esta ciudad, los ciudadanos solo alzan su voz y miradas para expresar: se acabó el abuso.

Es totalmente mentira que las organizaciones de masas [CDR, FMC, CTC, PCC, UJC] a nivel comunitario están en los barrios. No pasan de una treintena los que, entre consignas y banderitas de papel, se desgañitan en las sedes nacionales y provinciales de estas organizaciones.

¿Por qué el NTV no pone las imágenes del repudio popular al dictador Díaz-Canel y a Ramiro Valdés?

¿Por qué el NTV no pone las imágenes de represión violenta a manos de los elementos de las Fuerzas Armadas [FAR] y Ministerio del Interior [MININT] contra manifestantes pacíficos?

¿Que somos delincuentes? No familia, porque entonces en Cuba hay once millones de delincuentes.

Quisieron controlar la narrativa apagando tecnológicamente a Cuba, pero resulta que el corazón de las personas no lo pueden apagar.